jueves, 14 de mayo de 2015

La Fe Personal Y Las Pautas De La Asamblea General


La Fe Personal Y Las Pautas De La Asamblea General

La fe personal se aplica a lo que un individuo cree, observa o práctica en sus relaciones con Dios, y que no necesariamente se aplica a alguna otra persona. Tal fe es además una que no viola o contradice algún principio (norma) de las Santas Escrituras. Esta es estrictamente entre la persona y Dios, y no tiene el fin de ser impuesta sobre los demás, ni deberá ser usada como una norma para el juicio contra nuestro prójimo.

  El Capitulo 14 de Romanos es bien explícito y claro sobre este asunto; sin embargo, aunque la Asamblea General repetidamente no ha visto que sea apropiado hacer una pauta sobre algunas de estas cosas, aun después de buscar ardientemente la dirección divina, éstas tienen la tendencia de aflorar (surgir, emerger).

 La Iglesia de Dios es guiada por el hecho de que la Biblia, la Palabra inspirada de Dios, se aplica universalmente a todas las razas, y no fue dada para favorecer o acomodar a una persona o grupo particular por sobre todos los demás. Con todo, de tiempo en tiempo, vemos que hay personas y algunos grupos de individuos que continúan intentando compartir una fe personal, tratando de imponerla sobre todos los demás. Tales intentos a menudo son tan intensos, que las personas sometidas a tal presión se sienten intimidadas o condenadas hasta el extremo de sentirse miserables y confundidas.

 La fe personal puede ser algo que el individuo necesite a fin de tener unas relaciones felices con Dios, pero esto sería muy diferente en otras personas. Lo que uno come y bebe, con la excepción de las bebidas intoxicantes y la glotonería, es estrictamente una libertad personal que Dios no condena y nadie tiene el derecho de negársela a tal individuo.

 Usualmente, pero no siempre, es el miembro débil quien más es afectado al ser condenado por su fe personal o intimidado por alguien que intenta imponer su propia fe personal sobre él. Dios da una mirada muy severa (mortecina) a tal acción, y la contrarresta con las siguientes palabras de Pablo: "Así que, no juzguemos mas los unos de los otros: antes bien juzgad de no poner tropiezo ó escándalo al hermano" (Ro. 14:13).

 Cuando la fe personal es promovida con la idea de aplicarla a todos por igual, los problemas comienzan a emerger en la Iglesia. Siendo que tal fe no es promovida por la Asamblea General, viene a ser una de tómela o déjela de parte de la membresía general, y el diablo tiene una oportunidad fértil para causar divisiones, formando grupos a "favor" y en "contra". Estas diferencias causan pérdida de armonía en el Cuerpo. Estamos demasiado lejos en nuestra trayectoria y demasiado cerca del fin para permitir que esto impida el proceso de la perfección. Tenemos que estar preparados para bregar con esas situaciones cuando se salen fuera de la esfera personal, convirtiéndose en una espina de contención en la Iglesia. Ellas destruyen la unidad entre los santos, y por supuesto que podemos presentar cargos contra las personas envueltas por sembrar discordias.

 ¿Cuál es la respuesta para la cuestión de promover una fe personal? Pablo nos dice con claridad en tal respecto lo siguiente en Romanos 14:22: "¿Tienes tú fe? Tenla para contigo delante de Dios. Bienaventurado el que no se condena a sí mismo con lo que aprueba”.

 Si usted tiene alguna convicción personal en relación a la doctrina, práctica o gobierno de la Iglesia, sobre la cual la Asamblea General no ha hecho ninguna recomendación, o que es un asunto que no tiene relación con la membresía mundialmente, guárdelo para sí mismo por amor a la unidad del Cuerpo. Si es un asunto de suficiente importancia para ser presentado ante la Asamblea, de seguro que el Espíritu Santo impulsará a alguien más para que lo presente para la consideración general de toda la Iglesia.

La desunidad nunca ha resuelto nada, y por supuesto que tampoco nos conducirá más cerca de la perfección. El ver ojo a ojo y hablar una misma cosa es muy necesario.

Mantengamos nuestra fe personal para sí mismos, y veremos cuán rápido el Espíritu Santo puede llevarnos a la unidad global, la cual es tan vital para nuestra preparación para esa eventualidad por tanto tiempo esperada—el Rapto.

 La Iglesia de Dios no tiene el propósito de prescribir un código (norma) sobre el estilo del vestuario para todo el mundo, excepto el ya prescrito en los Consejos a los Miembros sobre el vestir. Tampoco prescribe un estilo de vida diferente al ya requerido—el de una forma de vida pura, santa y consagrada. Eso puede hacerse y es hecho a través de todo el mundo sin importar las diversidades culturales.

 En lugar de imponer la fe personal sobre otros, sería mejor luchar por la perfección de tal consagración a Dios y hacer lo que Pablo instruyó en Romanos 14: 19, si en realidad es una convicción personal: "Así que, sigamos lo que hace a la paz, y a la edificación de los unos a los otros”. Es evidente que Pablo nos está diciendo que es mejor edificarnos los unos a los otros que el gratificar nuestra fe personal al precio de los demás, quienes tal vez no la entiendan ni la abracen. El resultado sería una mayor unidad, una mayor armonía y un amor más grande en el Cuerpo de Cristo.

 

LA SEGUNDA VENIDA PREMILENARIA DE JESUCRISTO (Parte I)


LA SEGUNDA VENIDA PREMILENARIA DE JESUCRISTO

 "Porque la gracia de Dios que trae salvación a todos los hombres, se manifestó, Enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo templada; y justa, y píamente. Esperando aquella esperanza bienaventurada, y la manifestación gloriosa del gran Dios y Salvador nuestro Jesucristo'' (Tito 2:11-13)

 INTRODUCCION

Casi todo cristiano está de acuerdo en que Jesús viene otra vez a la tierra, y las únicas diferencias de opinión giran alrededor del tiempo, el propósito y los eventos que circW1dan Su venida. Es imposible exponer en detalle los eventos que ocurrirán; no obstante, la Biblia nos da un extenso bosquejo, al respecto, y Pablo instruyó a los santos de Tesalónica a que se consolaran unos a otros con esta esperanza.

 Pablo usa la palabra "gloriosa” para describir la venida del Señor. Parece que no había una palabra más apropiada que esta para poder ser usada en la descripción de tan hermoso evento. Existen muchas palabras en el léxico que tienen más o menos el mismo significado, y cualquiera de ellas-o todas ellas-pudieron haber sido usadas, pero parece que ninguna de ellas podría describir adecuadamente los eventos de la segunda venida de Jesús. Con la palabra "gloriosa" en la mente podríamos imaginamos la Segunda Venida de Cristo como algo ilustre, grandioso, radiante, majestuosos, brillante o hermoso.  Estas palabras han sido usadas tantas veces para describir eventos ordinarios que suceden tan a menudo que apenas parecen ser las más aptas para describir un evento tan excelso como lo sería la venida de nuestro Salvador Jesucristo. Con todo, nosotros tenemos que usar las mejores palabras que podamos y luego dejar el resto de la descripción a nuestra imaginación.

PROMESA DE SU VENIDA

La Biblia contiene muchas promesas concerniente al retorno de Jesús por segunda vez. En San Juan 14:2, 3 Jesús mismo le habló a Sus discípulos diciendo: "Voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere, y os aparejare lugar vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo." Luego, cuando Jesús ascendía al cielo ante la mirada perpleja de los discípulos dos varones en vestiduras blancas se pusieron junto a ellos y dijeron: 'Varones Galileos, ¿qué estáis mirando al cielo? este mismo Jesús que ha profetas lo habían declarado. De igual manera, en el momento propicio-para una hora que nadie sabe excepto Dios-la Segunda Venida de Jesús, en todo su esplendor y gloria, tornará lugar.

No obstante, la Biblia no guarda silencio totalmente en relación a cuándo será la Segunda Venida. El capítulo 24 de Mateo da una descripción bastante clara de las condiciones en que estará el mundo, mostrando así las señales de que el tiempo ya está cerca. El escritor señala que este evangelio del Reino será predicado en todo el mundo por testimonio a todas las naciones y después vendrá el fin. Las guerras, hambres y pestilencias como se mencionan en las Escrituras, pueden ser encontradas pueden ser encontradas en muchas partes del mundo de hoy. Además, muchas naciones han sido alcanzadas con el evangelio del Reino para este tiempo.

 Vamos a referirnos a la descripción que hace Pablo de eventos que ocurrirán en el retomo del Señor, como lo explica 1 de Tesalonicenses 4 16, 17: "Porque el mismo Señor con aclamación, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero: Luego nosotros, los que vivimos los que quedamos, juntamente con ellos seremos arrebatados en las nubes a recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor."

 ¿Cuándo ocurrirá el momento real de este evento en el programa de Dios? El mismo Dio le dará la orden a Su Hijo quien está en estos momentos sentado a la diestra del Padre, intercediendo por nosotros. El escenario será desplegado. Cada actor en el glorioso drama estará completamente versado en su parte, y los eventos ocurrirán exactamente como han sido trazados en la Biblia. Jesús descenderá con aclamación, con voz de arcángel y con trompeta de Dios. A lo que estos eventos se parecerán, nosotros no lo sabemos, 'pero estamos dispuestos a aceptar lo que la Biblia dice en relación a ellos.

Pablo escribió en 1 de Corintios 15:51-53: “He aquí, os digo un misterio: Todos ciertamente no dormiremos, mas todos seremos transformados...”

miércoles, 13 de mayo de 2015

¿Qué Es El "Evangelio Completo"?


¿Qué Es El "Evangelio Completo"?

La frase "evangelio completo" es una común en estos días. En casi todas las ciudades y poblaciones uno puede encontrar una iglesia o una misión que pretende enseñar el evangelio completo. Sin duda alguna que muchos de los que oyen o ven esto a menudo se preguntan lo que significa la frase "evangelio completo".

 La mayoría de estos grupos alegan que ellos predican una religión que se puede sentir, promoviendo el bautismo del Espíritu Santo y la sanidad divina. Esto tal vez no sea lo que cada grupo pretende decir, pero es lo que más agrada a la mayoría. Para ellos, éste es el evangelio de Jesucristo. Nosotros estamos de acuerdo con ellos en parte; pues si algunos enseñan menos de esto, no pueden pretender predicar el evangelio completo, ya que· éstos son elementos básicos e importantes de la doctrina del Nuevó Testamento. Sin embargo, ellos también se quedarán cortos si definimos la palabra "completo" como algo que significa "cabal" y "total".

 Cristo le encomendó a Sus discípulos la· gran comisión. Este mandato era el de ir a todo el mundo y predicar el evangelio a toda criatura, enseñándoles a guardar todas las cosas que El les había mandado. Cristo dejó diversos mandamientos a través de los escritos de los autores del Nuevo Testamento, los cuales El espera que todos los creyentes practiquen. Su voluntad es que todos los hombres de todas las naciones del mundo puedan oir y creer. El propósito de la Gran Comisión es que la Iglesia lleve el evangelio de Cristo a todas las naciones de este mundo y enseñe a aquéllos quienes han creído en el Señor por medio del testimonio de la Iglesia; éstos conocerán y practicarán el evangelio completo de Jesucristo. El "evangelio completo" encierra lo que Jesús dijo: "todas las cosas que os he mandado".

 Por lo tanto, la Iglesia ha sido comisionada a llevar el "evangelio completo" a todas las naciones. Cristo también nos dice: "Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, por testimonio a todos los Gentiles; y entonces vendrá el fin". (Mateo 24:14) Una de las preguntas puede ser aunque su contestación es explícita-¿Tendrá que predicarse el evangelio completo a fin de cumplir la profecía de Cristo? La contestación a ésta es un "sí" rotundo, pero esto da origen a otra pregunta-"¿Qué cosa es el evangelio completo?"

 A fin de cumplir los requisitos de Cristo, es evidente el hecho de que el fin no vendrá hasta que el mundo sea evangelizado completamente con la doctrina del Nuevo Testamento. Sin embargo, Dios ha fijado cierto tiempo para que esto se cumpla y Cristo no dilatará Su venida, ya que la Iglesia no sólo habrá terminado su trabajo, mas lo habrá concluido a su debido tiempo. No es suficiente el sólo predicar a Cristo y Su poder salvador; es insuficiente el sólo predicar el mensaje de salvación. Admitimos que esto es esencial, pero ello solamente es el principio del plan de salvación y el principio del mensaje del evangelio completo. El ir más allá de la experiencia del nuevo nacimiento, el predicar las experiencias de la santificación, el bautismo del Espíritu Santo, la sanidad divina y las obras milagrosas del Espíritu de Dios, tampoco es suficiente; hay algo más que esto.

 Dios ha trazado un plan excelso y glorioso. Este plan es que todos los hijos de Dios puedan ser reunidos en un redil, bajo un solo gobierno, promulgando una sola doctrina, a fin de que el mundo pueda creer en Cristo. El plan de que haya una Iglesia divina y gloriosa es también parte integrante del evangelio, y ningún mensaje puede estar completo sin predicar esta parte en conjunción con las otras. Esto, entonces, es lo que debería significar la frase "evangelio completo".

 Pero, ¿quién podrá predicar el evangelio completo? Este podrá ser predicado únicamente por aquéllos a quienes se les ha encomendado. Otros grupos y otras iglesias no lo pueden predicar. Ellos no lo creen; ni tampoco han recibido una revelación del mismo. Algunos grupos intentan predicarlo, pero no tienen ningún apoyo bíblico que respalde sus pretensiones de ser la verdadera Iglesia. Esta parte del evangelio es solamente dada a la Iglesia. Esta misma Iglesia también enseña el resto del mensaje evangélico. Por consiguiente, debemos concluir que la Iglesia de Dios es la única organización que puede y tiene la autoridad de predicar el mensaje del "evangelio completo".

 El mundo está en espera del mensaje completo. La Biblia nos hace saber que el plan de Dios para la tierra jamás podrá ser logrado hasta tanto no se alcance a todo el mundo con el mensaje completo, lo cual incluye la revelación y la visión del cuerpo de Cristo, que es la Iglesia de Dios. A las personas de este mundo se les debe dar la oportunidad de aceptar o rechazar la Iglesia, así como se les da la oportunidad de aceptar o rechazar la salvación, que es por medio de Cristo. La Iglesia es la única que tiene este mensaje; ella también es la única que tiene la responsabilidad de alcanzar el mundo con este mensaje. El fin del mundo depende de la Iglesia. Ella está trabajando según el horario divino, el cual no- le provee tiempo libre para que demore su misión o ponga excusas diciendo: "El Señor tarda Su venida porque no hemos terminado el trabajo". Este se terminará a su debido tiempo. Nosotros no podremos decir que el mundo ha sido evangelizado hasta tanto la Iglesia lo haga. Otros grupos podrán predicar el mensaje de Cristo a toda criatura, pero esto no exime a la Iglesia de alcanzar a estas mismas personas con el mensaje completo, aunque un conocimiento previo de Cristo hará nuestra tarea mucho más fácil.

 Otras personas están haciendo un buen trabajo. Las almas que ellas traen a Cristo están tan salvas como las que se convierten bajo el ministerio de la Iglesia. La Iglesia no critica ni está en contra de sus buenas obras, sino que le da gracias a Dios por las almas que son salvas bajo su ministerio y por el beneficio que nos rendirá su trabajo en el futuro. Por otra parte, la Iglesia no puede estar contenta al decir que ellos han alcanzado muchas almas las cuales ya no necesitaremos alcanzar. Estas iglesias no pueden hacer el trabajo de la Iglesia de Dios, ya que nuestra misión es singular y solamente nosotros la podemos hacer. No digamos que cierta cantidad de millones de personas han sido alcanzadas con el evangelio y que nosotros nos debemos apresurar a alcanzar las demás. En vez de esto, debemos apresurarnos en alcanzar a todas aquellas personas que no han oído acerca de la Iglesia divina de Dios, a pesar de si son salvos o ·no, ya que nuestra misión es la misma para ambos grupos (los salvos y los no salvos).

martes, 12 de mayo de 2015

Testimonio del Obispo Robert Hawkins del Terremoto de Nepal


El Obispo Robert J. Hawkins Jr., Coordinador de Misiones Mundiales de La Iglesia de Dios, pudo haber pensado en el himno "Más cerca de Ti Mi Dios", cuando un fuerte terremoto golpeó Nepal mediodía el sábado, 25 de abril.

Las preocupaciones de Hawkins no estaban a la distancia, viendo los informes sobre el terremoto en la televisión. Sus preocupaciones eran bajo sus pies.

[El Hermano Hawkins] estaba observando el Entrenamiento Bíblico en el santuario de una iglesia en Bharatpur, Nepal.
Sintió el temblor, y oyó el estruendo y los gritos de la gente.

"Al principio pensé que era un camión que venía por el camino", él dijo. "Pero, la tierra seguía temblando. Se movió hacia atrás y adelante, como el balanceo de un barco pequeño."

Hawkins dijo que el temblor duró sólo unos 90 segundos. "Evacuamos el templo y nos fuimos fuera en un área despejada. Bharatpur está en una zona muy rural, y el daño fue limitado." Pregunta lo que ocurrió durante el terremoto, y después, dijo Hawkins, "Nos tomamos de las manos y oramos."

Dijo que la gravedad del terremoto, que cobró más de 7.000 vidas, fue más evidente a medida que su grupo iba de regreso a la ciudad principal, a unos 10 minutos de distancia.

"Las calles estaban llenas de gente, y tuvimos mensajes en nuestros teléfonos que había sido un gran terremoto."

Hawkins dijo que el pueblo de Nepal estaba asombrados tanto como él y su equipo. "Nos dijeron que nunca habían experimentado nada como esto. Ellos dijeron que el último gran terremoto hace más de 80 años."

Hawkins y su grupo se quedaron alrededor de una semana, y la experiencia de una serie de réplicas.
Él dijo que los residentes de la zona hicieron lo sabio.

"Se mudaron a áreas abiertas (durante las réplicas), durmiendo en las calles y campos."
[Obispo Hawkins] estaba en Nepal con el Obispo Ray Dupre, secretario de campo del Supervisor General y el Director Internacional de la Escuela Biblica.

A ellos se unieron el Supervisor Nacional de Nepal Chadalawada Paul Sudhakar y Haroon Massey desde Pakistán.

Ellos estaban de visita con los cristianos de la congregación Bharatpur cuando ocurrió el terremoto. Tras el terremoto, los cuatro funcionarios de La Iglesia de Dios, pasaron los próximos días colectando información a los alrededores de los ministerios de la iglesia. "Vamos a dar a conocer sus necesidades", dijo Hawkins. "La Iglesia quiere saber lo que se necesita."

"Siempre hemos sido capaces de responder, pero nunca hemos estado en un terremoto antes", dijo. Hawkins se refirió a la gravedad del caso. "Era difícil de creer lo que estaba sucediendo, era angustioso y nuestros pensamientos se dirigían al Señor. No sabíamos is íbamos a lograrlo." Hawkins dijo que su esposa, Malissa, manejó las incógnitas muy bien.

"Ella estaba preocupada, por supuesto, pero me pareció que estaría bien. Ella es una mujer muy fuerte."

Durante los días siguientes al terremoto, Hawkins y su equipo recibieron la noticia de que los aeropuertos, ferrocarriles y carreteras estaban cerradas.

"Nos preocupaba que podríamos volver a Katmandú, y tal vez no podríamos tomar nuestro vuelo de fuera Nepal", Él dijo.

Algunas personas en el aeropuerto local se acercaron para brindar apoyo.

"A pesar de que el aeropuerto estaba lleno, ellos entraron en la sala de al lado y llenaron sus formularios", dijo. "Tan pronto como el avión despegó, alabé al Señor, con una gran sonrisa."

Hawkins dijo que era el evento más espectacular que jamás ha estado involucrado.

Nació en la ciudad de Nueva York, y creció en el sur de Nueva Jersey. Se convirtió en un cristiano en 1989, y se unió a La Iglesia de Dios en 1990. Él fue llamado al ministerio y sirvió en las iglesias en Florida y Colorado.

Hawkins dijo tener un amor por las misiones, desde su primer viaje misionero a Uganda en 1999. El Supervisor General, Stephen Smith, nombrado a Hawkins a su puesto de coordinador en 2010.

Él y su esposa han estado casados
​​por 20 años.

Este artículo apareció originalmente en el diario Cleveland Daily Banner y se publicó el 9 de mayo de 2015.